¿Se puede adaptar un audífono de una persona a otra? Al igual que no hay dos personas iguales, tampoco hay dos audífonos idénticos. No existen dos pérdidas auditivas iguales y por tanto, nunca vas a poder llevar audífonos de segunda mano o, al menos, no es aconsejable.
Vamos a contarte cómo se hace una adaptación abierta y segura para que el audífono no te falle en ningún momento.
Un audífono es un producto sanitario destinado a solucionar problemas auditivos o deficiencias auditivas. Se trata de un dispositivo que las personas usan como herramienta para convivir con la pérdida de audición. Estos productos cuentan con sistemas electrónicos que se programan y que procesan las diferentes frecuencias del espectro sonoro para ayudar a la persona a oír mejor. Así lo define la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios que también hace una diferenciación importante de los audífonos con los amplificadores de sonido.
Al tratarse de un dispositivo sanitario, las autoridades sanitarias desaconsejan que uses audífonos cedidos por otras personas. Es decir, no es conveniente que un familiar te preste el suyo porque a él ya no le sirva para su pérdida o porque un amigo quiera o necesite renovar sus aparatos auditivos. No lo hagas, básicamente, por estas 3 razones:
Además, cada audífono, sin importar el modelo, debe ser adaptado a cada paciente para que cumpla con todas las medidas sanitarias. Cada aparato tiene que cumplir con las indicaciones sanitarias al igual que los establecimientos donde lo compres, que además, están sujetos por Real Decreto para que queden totalmente regulados y autorizados por las autoridades sanitarias de las Comunidades Autónomas. Cosa que no ocurre con los amplificadores de sonido, los cuales no están registrados como aparatos sanitarios y la AEMPS los desaconseja para corregir pérdidas auditivas.
Te hemos contado que cada prótesis auditiva requiere una adaptación de carácter individual al tratarse productos sanitarios e higiénicos. Al igual que nadie te puede prestar sus lentillas, tampoco deberá hacerlo con un aparato auditivo.
El proceso de adaptación consiste en ajustar el dispositivo al oído del paciente teniendo en cuenta:
Es decir, teniendo en cuenta las características audiológicas y anatómicas de la persona que está buscando comprar un audífono. Estos datos, posteriormente, quedarán registrados en el centro auditivo o sanitario y formarán parte del historial del paciente.
Te recomendaremos el mejor centro auditivo cerca de tu casa, con grandes profesionales y máximas garantías para elegir un audífono que se adapte a tus necesidades.
Encuentra gratis tu audífono,
Podrás ahorrar hasta 2500€.
Antes de empezar a llevar un aparato auditivo, busca un gabinete auditivo homologado y confía siempre en empresas de audífonos con buenas opiniones. Ten en cuenta que la relación con el centro auditivo va a ser lo más duradera posible, así que busca que te aporte seguridad en la atención y en el producto auditivo que te están vendiendo.
¿Pero quién se encarga del proceso de adecuación? Únicamente un profesional sanitario tendrá el poder. Bien sea: audioprotesista o expertos en audiología o audioprótesis. El audioprotesista del centro auditivo tomará nota de las proporciones de tu oído para diseñar el molde del audífono porque tiene que adaptarse a la oreja, pero sobre todo, al canal auditivo
Se encargará también de activarlo, explicarte su funcionamiento, cómo se limpia o cómo se carga (en el caso de ser recargable) e incluso lo programará y te enseñará a controlar cada nivel para que lo adaptes a las distintas situaciones cotidianas: desde salir a dar un paseo hasta cuando vayas a pasar las tardes jugando con tus nietos.
Llevar uno o dos audífonos está permitido y ambos casos son de lo más común. Si estamos ante un caso de hipoacusia bilateral, es decir, en los dos oídos, el otorrino te prescribirá el uso de dos audífonos para ayudar a que tanto el oído izquierdo como el derecho mejoren el proceso de audición. Además, el paciente escuchará el sonido de forma binaural -por ambos oídos- con la misma intensidad.
Se conocen datos de que el 80% de las pérdidas auditivas afectan a los dos oídos. Por lo que es normal que cuando queda diagnosticado un caso de sordera, se adapten un par de audífonos. En el caso de detectar la anomalía auditiva sólo en un oído, conviene no dejar de hacerse revisiones porque el oído sano podría verse alterado en el futuro.
Contáctanos, es gratis y ahorra hasta 200€
Para poder responder a esta pregunta hay que empezar a contar desde que el paciente acude al centro auditivo, le toman medida de su oído, le realizan la audiometría y compra el audífono que mejor funciona para su hipoacusia, según los datos de la prueba auditiva.
Hay que sumarle el tiempo de dedicación del personal del centro en explicarte cómo se coloca y cómo arranca el audífono y la adaptación en casa que, gracias a la tecnología intuitiva, es muy sencilla de aplicar y en pocos días estarás manejando tu aparato a la perfección.
En resumidas cuentas, el gabinete auditivo no debería tardar más de una semana en ver cumplidos todos estos tiempos. Quizás la adaptación de audífonos en niños resulte algo más compleja, pero con la ayuda de la familia no será tan difícil.
Recuerda que es un producto de uso exclusivo y no importa el tiempo que se tarde en ponerlo a punto porque va a ser un beneficio a largo plazo para notar una mejoría en tu audición.
¿Qué ocurre cuando no tenemos al lado a la persona que nos ayudó a poner en marcha nuestro audífono? Pues que afloran las dudas cuando nos levantamos por la mañana y nos quedamos solos frente al audífono recordando todas las explicaciones que no dio el audioprotesista.
No te preocupes. Es normal que la primera toma de contacto sea dificultosa. Acomodarse a la nueva situación te llevará unos días. Ten presente que has pasado de no oír nada o muy poco a escucharlo todo en sus distintas intensidades.
Nuestro consejo es que empieces poco a poco y sin miedo. Sal a la calle para escuchar todos los ruidos que antes no percibías (el claxon de los coches, el canturreo de los pájaros…) y porque también necesitas hacer las comprobaciones pertinentes para saber si te lo han ajustado bien.
Tampoco te agobies si no has conseguido conectar tus audífonos bluetooth al móvil o a otras aplicaciones móviles que llevan asociadas los audífonos digitales. Practica en casa y solicita ayuda al centro auditivo siempre que lo necesites.
No tengas demasiada prisa en disfrutar de tus audífonos. Sabes que una buena adaptación conlleva una gran responsabilidad. Lo que sí es importante es que acudas al otorrino para que evalúe tu caso en cuanto notes que algo falla en tus oídos. Y si no sabes dónde acudir, nosotros te ponemos en contacto con el centro auditivo que tienes más cerca de casa. Sólo tienes que escribirnos un mensaje y nos encargamos de todo.
Conoce más y mejor todo lo que rodea al mundo de la audición con los contenidos de nuestro blog: consejos, novedades y toda la información que estabas deseando escuchar.