El tímpano es una de las partes más conocidas del oído medio y una pieza fundamental para el funcionamiento de la audición.
¿Quieres saber por qué? Sigue leyendo, te lo contamos todo sobre él.
En el principio del oído medio, separándolo del oído externo, se encuentra una fina membrana denominada membrana timpánica o, como es conocida comúnmente, el tímpano. Su función es recibir ondas sonoras de exterior que se acumulan gracias a su forma cónica, como si fuese un embudo.
Tras este proceso, las ondas sonoras se convierten en ondas mecánicas debido a la oscilación producida por la cadena de huesecillo del oído medio. Estos huesecillos son los encargados de conducir la vibración hasta la ventana oval, que se encuentra en la cóclea.
Otra de las funciones de la membrana timpánica es la protección del oído medio de líquidos y pequeños objetos externo. Además, junto con la trompa de Eustaquio, equilibra las presiones que se producen entre el oído externo y el oído medio.
El tímpano perforado es una de las afecciones auditivas más comunes del oído. Al ser una fina membrana, el tímpano está muy expuesto, tanto a las condiciones externas como a los cuerpos extraños que introducimos en el oído e incluso a las propias secreciones que pueden aumentar la presión de la membrana, dañándolo.
Al sufrir una perforación, el tímpano puede dejar de vibrar con normalidad, perdiéndose así audición. Este agujero puede estar causado por varios motivos:
Comprueba ahora y totalmente gratis tu salud auditiva con un estudio audiológico completo y en un centro de confianza cerca de tu domicilio.
El síntoma más significativo, que sirve para identificar la perforación, es un intenso dolor en el momento de la rotura que suele ir acompañado de un líquido transparente e incluso, a veces, sangre. Aunque se habrá aliviado a los pocos segundos, es recomendable acudir cuanto antes a un especialista para que evalúe el daño.
Los síntomas de una perforación en el tímpano más comunes son los siguientes:
La restitución de la membrana suele producirse de manera espontánea en un par de semanas, ya que cuenta con una gran capacidad regenerativa. Si el daño continúa, puede recurrirse a fármacos que ataquen inflamaciones o infecciones.
En casos más graves, cuando la cura no se produce, la solución es recurrir a procedimientos quirúrgicos, los más habituales son dos:
Si crees que has podido sufrir una perforación en el tímpano, no dudes en ponerte en contacto con tu centro auditivo. Si nunca has acudido a uno, no te preocupes, en Miaudífono te ayudamos a encontrar el más cercano a ti, sin ningún coste adicional. ¡Pregúntanos!
Conoce más y mejor todo lo que rodea al mundo de la audición con los contenidos de nuestro blog: consejos, novedades y toda la información que estabas deseando escuchar.